La CDMX domina la producción publicitaria: En 2024 se filmaron 797 spots, que representan el 63 % de todo lo que se produce en la capital.

El 66.24 % del empleo fílmico en la CDMX proviene de la publicidad; la industria genera 80,500 empleos directos temporales al año y beneficia a 209,300 personas por efecto multiplicador.

Las empresas de AMFI registraron 4,000 millones de pesos en inversión directa en la ciudad. 

Entre producción y postproducción, la industria publicitaria suma más de 2 mil millones de dólares, pero México apenas capta el 5 % de ese valor global. Esto muestra un margen de crecimiento enorme que depende, en gran medida, de fortalecer la comunidad profesional y las relaciones internacionales, posicionando al país como un socio estratégico y altamente competitivo para las marcas globales.

Un ecosistema fortalecido por décadas

De acuerdo con Avelino Rodríguez, CEO y Fundador de The Lift, la razón por la cual la Ciudad de México se ha consolidado como el centro de producción publicitaria del país tiene raíces profundas. Señala que la capital destaca por “sus capacidades históricas, su profunda cultura cinematográfica, su conectividad internacional y la certidumbre que aporta la Comisión de Filmaciones (C-Filma)”. Este conjunto de factores sumado a décadas de refinamiento técnico y profesional ha convertido a la CDMX en un referente natural para la producción de alto nivel.

Rodríguez también subraya que la publicidad es el sector más dinámico dentro de la producción física, pues su necesidad continua de innovación y rapidez genera actividad constante y estabilidad para toda la cadena productiva. Este dinamismo explica por qué seis de cada diez rodajes en la ciudad pertenecen al sector publicitario.

El crecimiento ha sido notable. En los últimos cinco años, el volumen de rodajes publicitarios ha aumentado a un ritmo muy superior al de la economía nacional, e incluso más acelerado que el cine y las series. Según Rodríguez, la CDMX ya se consolidó como “un hub internacional de producción para marcas globales”, una plataforma donde convergen talento, infraestructura y creatividad.

Profesionalización, alianzas y competitividad

Aunque suele pensarse que existe un capítulo de la AICP en México, Rodríguez aclara que formalmente no es así. Es la AMFI quien funciona como su equivalente local. Al adoptar estándares y lineamientos internacionales, esta organización ha logrado posicionar a México como un socio confiable, permitiendo colaboraciones clave, como la realización del AICP Show en el país. Este tipo de eventos fortalecen la presencia internacional de la industria y elevan el perfil de México frente a grandes marcas y productoras globales.

Los beneficios económicos se extienden a múltiples sectores: turismo, proveedores de servicios, logística, renta de equipos, vestuario, arte, transporte, catering y posproducción. Si bien áreas como el desarrollo de propiedad intelectual o la distribución pertenecen a otras cadenas, la producción física comparte una base industrial común que activa una amplia red de empleos y servicios.

Rodríguez también destaca que estamos ante una nueva generación de talento emergente con un potencial enorme. Para él, existe una oportunidad real de repetir el fenómeno de los años noventa, cuando México se convirtió en un laboratorio creativo que impulsó a directores que hoy son referentes globales. Ese ciclo, afirma, puede reactivarse si se sigue apostando por la formación, la exposición internacional y los proyectos que permitan a los nuevos creativos expandir su visión.